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Ayudar a los pobres mejora la vida de la sociedad
El Papa recibió a representantes de la Catholic Extension Society.


Por: Alessandro De Carolis | Fuente: Vatican News



Puerto Rico, 20 de septiembre de 2017. El huracán 'María' azota la isla, un infierno de vientos de 250 km/h y lluvia. Cuando se va, deja un rastro de 3.000 muertos y miles de millones de dólares en daños. Puerto Rico de nuevo, 20 de septiembre de 2022. Esta vez es el huracán "Fiona" el que se ha cebado con la isla caribeña, las víctimas son afortunadamente muy pocas, pero los desplazados y la destrucción vuelven a ser enormes. En esta zona, como en otras donde las formas de la miseria se ceban con personas y entornos, se encuentra la Catholic Extension Society, una organización más que centenaria (fue aprobada por Pío X en 1907) que aporta apoyo y fondos a las diócesis misioneras más pobres de Estados Unidos.

En busca de un futuro mejor

El Papa, al recibir a una representación, quiso expresar su gratitud por esta labor, que durante décadas se ha traducido en cercanía a los "más vulnerables".

“También les agradezco su valiosa contribución, tanto eclesial como civil, a la reconstrucción de Puerto Rico tras los huracanes y terremotos que han devastado la isla en los últimos años. Y, de nuevo, felicito a la hermana Norma Pimentel, galardonada con el Premio Espíritu de Francisco, por su servicio a tantos hombres, mujeres y niños que llegan a la frontera sur de Estados Unidos -esa frontera es caliente- en busca de un futuro mejor”.

Expresar el "estilo de Dios



Francisco acogió con satisfacción la preocupación pastoral de la Iglesia por las víctimas de la actual "cultura del despilfarro". De este modo, señaló, "su voz puede ser escuchada y la sociedad en su conjunto puede beneficiarse". Animó a la Catholic Extension Society a "seguir expresando el 'estilo de Dios'", que, reiteró, "nunca es distante, distanciado o indiferente. Al contrario, es un estilo de cercanía, compasión y ternura".

“Escuchar e incluir las experiencias y perspectivas de todos, especialmente de los marginados de la sociedad, enriquece la vida y el ministerio de la Iglesia; porque la Iglesia es como un gran tapiz, hecho de muchos hilos individuales que proceden de diferentes pueblos, lenguas y culturas, pero que el Espíritu Santo teje en la unidad. En efecto, el Espíritu crea la unidad armonizando la multiplicidad de los miembros del Cuerpo de Cristo y la diversidad de sus dones”.







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