Menu


Clausura. Feminismo radical
Entrevista a Rafael Ángel Aguilar Sánchez


Por: Luis Javier Moxó Soto | Fuente: Catholic.net



Rafael Ángel Aguilar Sánchez (Córdoba, 1973) es periodista, Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad de Sevilla, completó su formación en la Escuela de Periodismo de El País. Desde 2004 es miembro de la redacción de ABC Córdoba, periódico del que es columnista en las páginas de Opinión desde 2007 y jefe de sección desde diciembre de 2010.

Ha escrito el libro “Clausura. Feminismo radical”, donde aborda, en forma de crónica sencilla, descriptiva, el sentido y misión de la vida consagrada contemplativa femenina, una vocación de amor y servicio a la Iglesia y a toda la humanidad.

Rafael, ¿cómo es su visión acerca de la vida consagrada en la actualidad, especialmente en España? ¿podemos hablar de crisis o de cambio en su origen o procedencia? ¿cómo se está viviendo el relevo de unas generaciones a otras? ¿y las fusiones o uniones entre sus diferentes instituciones?

Es evidente que ha habido un descenso de vocaciones y que muchas órdenes lo están pasando mal, por lo que es frecuente que aparezcan en la prensa noticias sobre cierre de conventos. Lo importante es que a pesar de la situación crítica que las comunidades viven en ocasiones se van incorporando mujeres jóvenes a ellas que mantienen el vigor de la vida contemplativa, que no solo hay que medir por la cantidad de las personas que la forman, sino también por la calidad de sus integrantes, esto es, por la fuerza con la que siente la llamada y por cómo la desarrollan. Es cierto que algunas órdenes sobreviven gracias a la incorporación de monjas que no son españolas: se trata de un fenómeno creciente que he podido constatar cuando he recorrido España de convento en convento para escribir mi libro. Pero no hablaría de crisis en sentido puro: creo que lo que está produciendo es un redimensionamiento de la vida contemplativa y que lo fundamental es que persiste en el siglo XXI; a mí eso es lo que me parece un hecho llamativo, porque estas monjas, mermadas en su número, mantienen las formas de vida conventual de los siglos XVI o XVII. En mi viaje de seis meses para visitar conventos he llevado en mi mochila los libros que escribió Santa Teresa de Jesús y en los describe su ideal de vida contemplativa, y me ha llamado mucho la atención que esos mismos modos de vida eran los que me iba encontrando, tal cual, en los conventos del siglo XXI. Sobre el relevo generacional: cuesta que se incorporen religiosas jóvenes pero las hay y con mucha fuerza. A mí me ha llamado la atención encontrar a personas de treinta o cuarenta años que han renunciado a todo en la vida, a carreras universitarias o a parejas, en beneficio de la clausura.

¿Se vive con preocupación el descenso, y envejecimiento, de las religiosas de origen español en monasterios o conventos que conservan un gran patrimonio histórico, artístico y cultural? ¿o más bien se vive como un rejuvenecimiento de las congregaciones? ¿no sería mejor encauzar esos lugares hacia el aprovechamiento de movimientos eclesiales y nuevas comunidades de la Iglesia, antes que arrendarlas o venderlas con otros fines?

La preocupación por el cierre de conventos es creciente. En la provincia de Córdoba, por ejemplo, acaba de extinguirse una comunidad de carmelitas descalzas, porque quedaban muy pocas monjas y ya no podían hacerse cargo del cuidado del edificio en el que vivían. Esto ha ocurrido en la localidad de Bujalance, donde ha habido una polémica importante por el futuro de los bienes patrimoniales del monasterio. Creo que lo ideal sería que los edificios que durante siglos han estado dedicados al rezo mantuvieran su carácter religioso de alguna manera, porque el pueblo los identifica como tales. Las comunidades pueden disolverse si no hay más remedio, pero en la memoria de los fieles quedan los siglos de vinculación con la vida contemplativa. Y esa corriente de memoria habría que preservarla.



¿En los Medios de comunicación se tiene una visión más o menos ajustada a la realidad de lo que es y supone la vida consagrada femenina? ¿Qué opina de la película Novitiate (2017), que hace poco ha lanzado la plataforma Netflix, por ejemplo, en lo que se refiere a la dificultad de adaptación que hubo a aceptar las reformas del Concilio Vaticano II? ¿Hay alguna película y libro que nos pueda recomendar en este sentido que refleje más fielmente lo que supone esta vocación?

Las noticias que aparecen en los medios de comunicación sobre las religiosas contemplativas suelen tener dos vertientes: o hablan de la falta de vocaciones y del cierre de conventos o de la sorpresa porque este modo de vida, en apariencia anticuado, siga activo. Creo que la imagen que proyectan los medios sobre la vida contemplativa está basada en un estereotipo, en un cliché que no abunda demasiado en la riqueza espiritual y en la valentía de estas mujeres. En mis reportajes de ABC sobre las monjas de clausura y en mi libro he tratado de romper estos esquemas y en recrear las historias humanas que hay detrás de los hábitos, que son riquísimas, interesantísimas, porque se trata de personas que han tomado una decisión que la mayoría de la gente no entiende, en ocasiones ni siquiera sus familias, por perseguir un ideal divino, un amor a veces incomprensible. La película "Novitiate" retrata muy bien estas situaciones de incomprensión: me parece una película bellísima, y la vi después de escribir mi libro. Muchas de las situaciones que plantea están presentes en "Clausura. Feminismo radial", como por ejemplo el rechazo de algunas familias de la religiosas a su vocación, las dudas de las monjas, la rectitud de la vida a la clausura... Además, "Novitiate" da idea del conflicto que creó el Concilio Vaticano II en muchas comunidades, que no entendieron la reforma que llevó a cabo Roma porque la veían como una amenaza. Es una película absolutamente recomendable. Cualquiera que haya leído a Santa Teresa de Jesús, como he hecho yo para leer mi libro, verá reflejada en esta película algunas de las inquietudes de la Doctora de la Iglesia, como la obsesión por darle al Amado todo lo que recibe de él. De otro lado, quien se quiera acerca a la clausura puede leer a autores españoles contemporáneos, que la han abordado con brillantes, como por ejemplo Juan Manuel de Prada en "El Castillo del Diamante", Jesús Sánchez Adalid, que prologa mi libro y que escribió hace unos años "Y de repente Teresa". Recomiento también la novela de Josefina Molina "En el umbral de la hoguera", en el que relata los viajes de Santa Teresa a Andalucía. Molina, a quien entrevisto en mi libro, dirigió la serie sobre Santa Teresa de Jesús que protagonizó Concha Velasco en TVE en los años 80 del siglo pasado: esa serie es también un buen modo de acercarse al origen de la vida de la clausura.

El Papa Francisco ha definido la vida consagrada como "alabanza que da alegría la pueblo de Dios, visión profética que revela lo que importa", y a la vez ha dicho también que las religiosas son servidoras, no sirvientas. ¿Qué cuestiones tiene pendiente la Iglesia en este sentido acerca de la mujer consagrada respecto de la jerarquía eclesiástica y ejercer un puesto de mayores responsabilidades pastorales? ¿A qué piensa puede referirse la religiosa maltesa, Carmen Sammut, presidenta de la Unión Internacional de Superioras Generales (UISG), cuando dijo que esperaba que el Papa se pronunciara sobre el diaconado femenino?

Creo que la Iglesia debe reconocer con más ahínco el papel que desempeñan estas mujeres en su estructura. Su misión es rezar, rezar y rezar, y eso hacen. Cumplen con su misión dentro de la Iglesia de un forma incuestionable y lo hacen en medio de muchas dificultades, como la citada falta de vocaciones y la incomprensión de la sociedad.

Muchas gracias, Rafael, por concedernos esta entrevista y su aportación a la extensión de un mejor y mayor conocimiento de la vida contemplativa. Por último, quiero preguntarle: ¿Cuáles son las causas del aumento vocacional en institutos como, por ejemplo, el de Iesu Communio? ¿qué encuentran de atractivo las jóvenes de hoy en día en la vida consagrada: servicio a los pobres, búsqueda de sentido a la vida, radicalidad evangélica,... en lo que es o en lo que se hace en la misma?

He escuchado hablar mucho de Iesu Communio: mi libro acaba con una visita a un monasterio de Burgos donde estas religiosas son muy conocidas. La existencia de comunidades como ésta es una prueba evidente de que el vigor de la vida contemplativa tiene pulso, de que hay empuje. Muchas jóvenes confiesan que encuentran en la clausura una altura de miras en su destino que no tienen en la calle, y eso es sorprendente al tiempo que ha de alegrarle a la Iglesia. Tras las rejas, muchas jóvenes encuentran pureza, hermandad, paz. Y eso es sorprendente en pleno siglo XXI. Por eso merece ser contado.









Compartir en Google+




Reportar anuncio inapropiado |