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AVATAR y la guerra contra el materialismo

AVATAR y la guerra contra el materialismo
Al valorar la película en sí misma, digamos que es puro espectáculo y entretenimiento, con una llamada al asombro ante las nuevas tecnologías y el poderío visual que plasman en la pantalla, pero repleta del mensaje panteista de James Cameron


Por: Laura Martí/ La mirada de Ulises | Fuente: Análisis Digital



25/01/10

He de reconocer que he visto “Avatar” dos veces, aún a riesgo de parecer que sigo el ejemplo de Hugo Chávez, pero la verdad es que me movían otras razones bien distintas. Y es que necesité la segunda para poder liberarme de prejuicios ideológicos de los que la película, por cierto, está sembrada. En esa segunda ocasión, decidí verla en 3D… y si es verdad que es el futuro del cine, espero que puedan eliminar las incomodidades de llevar unas gafas que te hacen presión sobre la nariz y la oreja. Haciendo un poco de ciencia ficción, tal vez en un futuro próximo puedan salir del mismo asiento y adaptarse a tu morfología, tamaño… ¿O es pedir demasiado? Pero, entrando ya en materia, debemos preguntarnos, ¿qué le pedimos al cine?, ¿qué es buen cine para nosotros? Para mí lo básico de una película es que tenga una buena historia que contar, un sólido guión sobre el que pueda sustentarse, y un director que, dando unidad a todo, pueda sacar brillo a los actores…

Y con esos mimbres deberíamos abordar “Avatar”, película que parece diseñada casi exclusivamente para hacer taquilla, empezando con su mastodóntico presupuesto y terminando en su ambiciosa campaña de promoción. Al valorar la película en sí misma, digamos que es puro espectáculo y entretenimiento, con una llamada al asombro ante las nuevas tecnologías y el poderío visual que plasman en la pantalla, aspectos muy tratados en esta misma web y en tantos artículos que ha generado el trabajo de James Cameron. Pero conviene que vayamos un poco al guión, a la historia que el director trata de hacernos llegar, y ahí sí quiero compartir algunas reflexiones.


Lo que más me ha llamado la atención en la cinta es lo que, traduciendo al cristiano con el idioma universal de Cervantes, sería un respeto por la vida como algo sagrado: por la vida del planeta y de sus habitantes, del hábitat natural con todos sus pobladores, de nuestros congéneres y de quienes tienen otra cultura…; frente a esa actitud positiva de respetar lo creado y lo bello, el afán destructivo del hombre… con guerra y ambición, con una excesiva preocupación por lo material y lo económico.

Pero por debajo de toda esa ecología y pacifismo que puede adquirir una lectura política y actual, late un hondo sentido de la espiritualidad que alienta al ser humano –aunque aparezca impregnada de panteísmo ( La creencia de que todo es divino. No existe entonces un Dios personal sino que Dios y el universo son la misma cosa. No habría entonces, en esencia, distinción entre Dios y el mundo) algo que en nuestros días trata de ser extirpada de raíz… No nos resulta extraña la actitud cínica del empresario que hace bromas a costa de los demás y desprecia los valores humanos, ni tampoco la del coronel, hombre de poca reflexión y corazón endurecido y vengativo… estereotipos que recuerdan a algunos que acaparan las portadas de los periódicos y que demuestran preocupantes y limitados horizontes de humanidad.


En el lado opuesto encontramos a Trudy, la piloto que valientemente se atreve a decir “yo no me he alistado para esto” imposible no acordarse del médico que estos días quiere acogerse a la objeción de conciencia ante la inminente ley del aborto–, reacción heroica que responde a unos ideales y que nos habla de quienes luchan por no plegarse a los dictados de lo políticamente correcto…


Por eso, para mí “Avatar” es –aceptando todos sus clichés, y su falta de matices y conflictos interiores en sus personajes– un homenaje a esos héroes anónimos de la calle que tratan de defender sus ideales, que luchan para que prevalezca la verdad y la justicia en el sentido más humano y profundo.


AVATAR

Aventuras alienígenas en 3D
Director: James Cameron
Intérpretes: Sam Worthington, Zoe Saldana, Sigourney Weaver y Michelle Rodríguez
Nacionalidad: EEUU, 2009
Fecha estreno: 18/12/2009







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