La religión no es contraria a la ciencia pero tampoco la ciencia puede ser contraria a la moral. Si se desprotege la vida humana, sobre todo cuando ésta es todavía incipiente, se estará subordinando la vida del embrión a intereses económicos y de investigación.

Ataques continuos contra los más indefensos, los no nacidos. Esta es la nueva concepción de la ciencia; “un gran negocio en el que la destrucción de seres humanos proporciona enormes beneficios económicos”.

Para la asociación Profesionales por la Ética, el Proyecto de Ley de Investigación Biomédica “no protege en absoluto la vida humana sino que abre la posibilidad a la práctica legal de actos y acciones contrarias a la dignidad del ser humano como la clonación”.

José Agudo, Responsable del Área de Bioética de Profesionales por la Ética, criticó lo que muchos científicos y expertos han comentado en diversas ocasiones: que el Proyecto de Ley determina que hasta el día decimocuarto de embarazo el producto de la fecundación recibe el nombre de preembrión.

¿Qué es un preembrión? Un concepto que “no tiene fundamento científico ni antropológico”, recordó Agudo. De hecho, desde el mismo momento de la fecundación hay vida, hay un embrión que debe ser “protegido y respetad”.

Asimismo, denunció que la Ley de Biomedicina “está en la misma línea” que la reforma de la Ley de Reproducción Asistida impulsada por el Gobierno y “desprotege absolutamente al embrión, convirtiéndolo de nuevo en objeto de experimentación o destrucción”.

Agudo recordó que el Proyecto de Ley prohíbe la creación de embriones destinados a la investigación pero autoriza la llamada activación de ovocitos por transferencia nuclear que no es sino obtener células madre embrionarias como material de investigación y para ello se producen embriones clónicos como fuente de abastecimiento de tales células. Por lo tanto, se permite la clonación.

Profesionales por la Ética incidió en que los avances científicos “nunca pueden ser a costa de la eliminación de seres humanos, aunque no hayan nacido. Progreso científico SÍ, pero NO a cualquier precio”.