Sotto il Monte, una tierra buena

El beato Juan XXIII es conocido como el Papa Bueno. Con su talante simple, cariñoso, cercano con todos y su humildad de corazón, se ganó el respeto y la simpatía de la gente común y de los poderosos del mundo. El Papa Bueno podía venir sólo de una tierra buena. Esta tierra es Sotto il Monte, un pueblecillo bergamasco de familias de agricultores, enraizadas en una fe cristiana sólida y sencilla. Vale la pena peregrinar a la casa natal del Papa Juan, abierta hoy como museo, y a otros sitios de interés en torno a la figura de este santo Pontífice. Para apreciar mejor estos lugares conviene recordar la talla humana y espiritual de este buen Sucesor de Pedro.


Hombre de pueblo con misión universal

Ángel José Roncalli Mazzola nació en Sotto il Monte, provincia de Bérgamo, el 25 de noviembre de 1881 en el seno de una familia campesina. Ese mismo día fue bautizado. Era el cuarto hijo, de un total de trece hermanos, hijos de Battista y Marianna.

A la edad de once años entra en el seminario diocesano y en 1901 pasa a ser alumno del Seminario Romano. Siempre se distinguió por un grande amor a Dios, confianza en los santos y en la Iglesia, y celo por las misiones, manifestado en la Obra de Propaganda de la Fe en Italia, y más tarde como Papa, con la fundación del Seminario del PIMME en los terrenos de su casa natal.


Celoso sacerdote

Fue ordenado en Roma, en la iglesia de Santa María en Monte Santo (Piazza del Popolo) el 10 de agosto de 1904. Al día siguiente celebró su primera misa en las criptas vaticanas. Inicia su ministerio como secretario de monseñor Giacomo María Radini Tedeschi y como profesor del seminario. Fue capellán militar con grado de sargento durante la Primera Guerra Mundial y atendió con diligencia y suma caridad a los soldados tuberculosos, con grave riesgo de contagio. Acabado el conflicto fue nombrado director espiritual del seminario y más adelante presidente del Consejo central para Italia de la Obra de “Propaganda Fide”.


Humilde y eficaz representante pontificio

En 1925 es nombrado Visitador apostólico en Bulgaria y consagrado obispo en la iglesia de San Carlo al Corso, en Roma. Desde 1931 es Delegado apostólico en el mismo país. Realizó los primeros contactos con las autoridades ortodoxas después de siglos de separación. En 1934 funge como Delegado apostólico en Turquía y Grecia. Ahí destacó por su labor de acercamiento entre católicos y ortodoxos y llevar ayudas humanitarias a los más necesitados, a los prófugos de la guerra y de los desastres naturales, sin distinción de credo o partido.

En Turquía, con tacto y sencillez logró establecer relaciones diplomáticas con la Santa Sede. Su posición neutral en circunstancias muy difíciles le permitió ayudar al pueblo griego acosado por el hambre durante la 2ª guerra y salvar a miles de judíos del exterminio.

En 1944 fue nombrado Nuncio apostólico en Francia, donde mostró nuevamente sus dotes de bondad, calma y prudencia ante la situación política de la post-guerra y la situación eclesial de los sacerdotes obreros y los obispos acusados de colaboracionismo.

El 12 de enero de 1953 es creado cardenal por Su Santidad Pio XII y nombrado Patriarca de Venecia, donde pudo explayar sus cualidades pastorales con valiosas iniciativas como el Sínodo Diocesano y el acercamiento de los fieles a la Sagrada Escritura.


El Papa Bueno

El 28 de octubre de 1958 Dios lo llamó a la Cátedra de Pedro con el nombre de Juan XXIII. En su ministerio papal quiso mostrar más claramente el rostro materno de la Iglesia: se acercó cuanto pudo a los fieles en las audiencias, visitó las parroquias de la Urbe, los hospitales y las cárceles. Reunió un Sínodo Diocesano y reorganizó el Vicariato de Roma y con grande humildad de corazón salió al encuentro de los hermanos de las iglesias separadas de Roma.

A un año de su elección anunció la convocación del Concilio Vaticano II, su contribución más notable, abierto solemnemente el 11 de octubre de 1962 con la intención pastoral de presentar la doctrina tradicional de la Iglesia de una manera más apta a la sensibilidad moderna. Escribió las encíclicas “Mater et Magistra” (1961) y “Pacem in Terris” (1963).

Sembró entre las naciones el anhelo de la paz y la solidaridad. Murió el 3 de junio de 1963 luego de varias semanas gravemente enfermo. Los medios informativos del mundo dedicaron sus primeras páginas a recordarlo con grande estima, incluso en los países no cristianos y en los musulmanes, como Indonesia.

Fue beatificado por Juan Pablo II el 3 de septiembre de 2000. Su cuerpo reposa incorrupto a los pies del altar de San Jerónimo, en la Basílica Vaticana.


Sugerencias para la visita

La visita a los lugares relacionados con el Papa Juan se puede hacer en dos horas, dedicando oportunos momentos a la oración. Hay frecuentes misas celebradas en el lugar, sea en las parroquias, sea en la sede del Seminario del Pontificio Instituto para las Misiones Extranjeras (PIMME).

1. El recorrido pede comenzar en la Casa natal de los Roncalli, la antigua granja donde vio la luz la mañana del 25 de noviembre de 1881.

2. Ahí se encuentra el museo Casa Natal de Juan XXIII, con algunos objetos personales y recuerdos de la familia, así como los instrumentos del trabajo agrícola de la época, que dan una idea de la vida familiar del pequeño Angelo.

3. La iglesia de Santa María, construida hacia 1450, era parroquia desde 1823. Ahí se conserva la pila bautismal donde el párroco, Don Francesco Rebuzzini, bautizó al recién nacido la tarde del mismo día en que nació. En esa misma iglesia Angelo Roncalli celebró su primera misa en el pueblo el 15 de agosto de 1904.

4. Vale la pena salir del pueblo para visitar el santuario de la Virgen de las cantinas. Ahí el cardenal Roncalli celebró su última misa en el pueblo, dos meses antes de ser elegido Sumo Pontífice.

5. Volviendo al pueblo se puede visitar la parroquia de San Juan Bautista, construida entre 1902 y 1927, consagrada por monseñor Roncalli, siendo él Delegado apostólico en Bulgaria, el 21 de septiembre de 1929. Durante sus vacaciones, monseñor Roncalli impartía ahí la catequesis a los adultos las tardes de los domingos.

6. Junto a esta iglesia se encuentra la capilla de la Reina de la Paz, que conserva un intarsio de madera con la imagen del Papa Juan y en cuyas criptas se encuentran los restos mortales de los padres del Papa y cientos de exvotos.

7. Se puede visitar también la Casa Maitino, donde monseñor Roncalli pasaba sus vacaciones. Ahí se encuentra ahora un museo organizado por su fiel secretario, monseñor Loris Capovilla.

8. A tres kilómetros de Sotto il Monte se encuentra la abadía de San Egidio, bella construcción románica del siglo XI, levantada por los monjes de Cluny. De ahí se puede pasar a la ciudad de Bérgamo, cuya parte alta se levanta elegante coronando una colina rodeada de bosque.


Cómo llegar:

• En coche: autostrada A4 Torino-Venezia, salida en Capriate, proseguir hacia el norte (unos 15 kms)
   
• En tren: Lecco-Bérgamo, estación Ponte San Pietro, autobús hacia Sotto il Monte.
  
  
  Más informaciones:
  
  - Parroquia de san Juan Bautista: tel 035.791146
  
  - Casa del Peregrino: tel. 035.791417
  
  - www.papagiovanni.com
  Casa natal del Papa Juan XXIII
  Via Colombera, 5
  24039 Sotto il Monte Juan XXIII (BG) - ITALIA
  Tel. 035.791101
  
  
  Fuentes:
  
  - Folleto ilustrativo, B. N. Marconi, Génova
  - Mondo e Missione, n. 7, julio 2004, Suplemento.
  - Agustín Farnedi O.S.B., Guía a los santuarios de italia 2000, PIEMME.