"Dichoso el pueblo escogido por Dios" Salmo 32
También a otros pueblos tengo que anunciarles el Reino de Dios, pues para eso he sido enviado
Por: Mons. Enrique Díaz | Fuente: Catholic.net
Continuamente, sobre todo ahora, se alude a la situación difícil y discriminatoria que vive la mujer no sólo en las comunidades, sino en las familias, en la escuela y en casi todos los ámbitos de nuestra patria. Han sido siglos de un machismo exagerado que ahora, cuando se trata de superarlo, con frecuencia de adoptan posiciones extremas.
Jesús durante toda su actividad aparece sensible y cercano a toda esta situación de la mujer, que en aquellos tiempos era mucho más discriminatoria y esclavizante. En el pasaje que San Lucas nos ofrece este día, la suegra de Pedro sufre la enfermedad y le piden a Jesús que haga algo por ella. Jesús, de pie junto a ella, manda con energía a la fiebre y la fiebre desapareció. Ésta es la actitud de Jesús: ponerse cercano, quitar las enfermedades, restablecer en dignidad.
Es triste que muchas mujeres en búsqueda de libertad caigan en un liberalismo y hedonismo que asusta. No queriendo quedar oprimidas por los hombres, caen en cadenas de sensualidad, de odios, de irresponsabilidades. Jesús nos enseña la verdadera relación que puede haber con la mujer: respeto, escucha, atención y valorarla en toda su dignidad.
Si miramos e imitamos esta forma de ser y de actuar de Jesús, podremos superar rivalidades y luchas sin sentido que impiden superación, armonía y unidad. El Papa Francisco insiste en que en la Iglesia y en la sociedad no le hemos dado su valor real a la mujer y ahora en la preparación del Sínodo les ha pedido su palabra y participación. La mujer sigue siendo discriminada, tenida muy poco en cuenta.
Que tenemos que reconocer el papel importante que juega, no en comparaciones o pleitos de poder, sino en la Evangelización y en la construcción del Reino.
Hoy contemplemos la actuación de Jesús frente a la mujer, frente a todos los que estaban enfermos y aprendamos de Él. Las multitudes lo buscan porque en Él encuentran verdadera vida y libertad. ¿Qué espero yo de Jesús? ¿Por qué lo busco? ¿Qué me enseña en este día?