Quirino de Tivoli, Santo
Por: Antonio Borrelli | Fuente: Santiebeati.it
Mártir
Santo Tradicional - No incluido en el actual Martirologio Romano
(Sugerimos leer el artículo ¿Santos descanonizados?)
Etimológicamente: Quirino = “del dios Qurinal”. Viene de la lengua latina.
Fue uno de los cinco mártires con este nombre en los primeros siglos. Todos sabemos ya los duros golpes que les infligían a los cristianos por el sólo hecho de confesarse como tales. Los emperadores pensaban que era una afrenta contra el imperio y sus muchos dioses protectores.
Del Quirino de hoy la acreditada 'Bibliotheca Sanctorum' nos da poca información: su cuerpo se mantuvo en la basílica de San Lorenzo en Tivoli, pero de él no se sabe prácticamente nada seguro, se conoce que su nombre fue incluido en el Martirologio Romano por Cesare Baronio.
Existe la posibilidad de que se trate del mártir del mismo nombre en Siscia en Croacia, que se venera el mismo 4 de junio; de este último si se tienen algunas noticias:
Quirino Obispo, en el año 309, durante la persecución de Diocleciano, fue detenido por el Decano Massimo e incitado a sacrificar a los dioses, como prescribía el edicto imperial; el obispo resueltamente se negó, por lo que fue azotado y encerrado en la cárcel, donde fue capaz de convertir al guardián Marcello.
Después de tres días, fue llevado ante el Decano de Panonia Amanzio, que después de no tener éxito cuando lo instó a obedecer el edicto, ordenó que lo arrojaran al río Sva con una piedra atada alrededor de su cuello.
Los cristianos rescataron el cuerpo y lo enterraron en Savaria cerca del lugar del martirio; hacia el comienzo del siglo V, el cuerpo s. Quirino fue trasladado a Roma y fue colocado en un mausoleo conocido como Platonia, detrás del ábside de la basílica de San Sebastián en la Vía Apia, y allí fue venerado los dos siglos siguientes, como lo demuestran los registros de la época.
Más tarde, y es aquí cuando la información es incompleta y no segura, los restos fueron trasladados y tal vez dispersos en Milán, Aquileia, Roma y en este punto también podríamos formular la hipótesis de Tivoli.
Su nombre se hizo muy popular entre los romanos para designar a los Sabinos y los Quirites.
¡Felicidades a quien lleve este nombre!