El Cardenal Andrea Cordero Lanza de Montezemolo, Arcipreste de la Basílica Papal de San Pablo Extramuros, es arquitecto, fue ordenado sacerdote en el año de 1954 para la Diócesis de Roma, y nombrado Arzobispo en 1977.

Ha trabajado en el servicio diplomático de la Santa Sede en los cinco continentes. Fue Nuncio Apostólico en Papua – Nueva Guinea y las Islas Salomón; despues en Nicaragua sandinista y en Honduras anti-sandinista, logrando salvar pesonas, víctimas de graves casos de secuestro.

En seguida, fue nuncio Apostólico en Uruguay, país de fuertes tradiciones laicas, durante dos viajes apostólicos del Papa Juan Pablo II. En la capital, Montevideo, está la gran cruz que él mandó enalzar como recuerdo de tal ocasión en una gran plaza del centro, conocida como “la Cruz del Nuncio”. Desde 1990 hasta 1998, fue Delegado Apostólico en Jerusalén y Palestina, en este tiempo, cuando fue el promotor de la institución de la Asamblea de los Ordinarios Católicos de Tierra Santa y el artífice del Acuerdo Fundamental que, desde 1993, normalizó las relaciones entre la Santa Sede e Israel, de donde fue el primer Nuncio Apostólico. Desde 1998 hasta el 2001 fue el Nuncio Apostólico en Italia y la República de San Martín.

Inmediatamente después, el Papa le confió el estudio para la reorganización del complejo extraterritorial de San Pablo extra Muros, convirtiéndose posteriormente en el primer Arcipreste de la Basílica Papal de San Pablo extra Muros, en el 2005.

El Papa Benedicto XVI lo creó Cardenal el 24 de Marzo de 2006. Actualmente está llevando adelante importantes trabajaos de reordenación general, así como trabajos de arquitectura y de restauración en el complejo de San Pablo extra Muros, en colaboración con los monjes benedictinos de la Abadía de San Pablo, para el bien de los peregrinos del mundo entero. Este trabajo ha tomado una particular importancia por el Año Paulino (28 – VI- 2008 / 29-VI-2009), cuya organización él preside.