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Comentario de nuestros lectores

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Comentario 6


Por: Redacción | Fuente: www.buenas-noticias.org





Desde la primera visita del Papa a México que me tocó vivir, yo sentía en mi corazón una inmensa emoción, y en su última visita a México yo tuve la oportunidad de verlo de cerca y al verlo sentí la necesidad de encomendarle mi vocación. En esos días yo inicié un seguimiento vocacional con la congregación de las Hijas de San Pablo. Ha sido un camino difícil por las dificultades familiares, ya que mi familia se opone.
El 2 de abril de ese año, se celebraba el bautizo de mi hermanito y mi cumpleaños. Unos días antes falleció mi bisabuelita y estábamos en la misa de la bendición de la cruz para su tumba, cuando a mitad de misa empezó el repique de las campanas y nuestro sacerdote nos dio la mala noticia de la muerte de nuestro Papa Juan Pablo II. Fue un momento inmensamente triste por su perdida. Gracias a Dios, ahora tenemos un gran ángel y próximo Santo que nos cuida desde el cielo y sé que él me va a ayudar en mi discernimiento para poder encontrar mi vocación y poder escuchar lo que Dios quiere de mí.
Valeria
Edad: el próximo 2 de abril cumplo 19 años
Estado de México


Sólo quiero mencionar que tuve la bendición de ver 3 veces a S.S. Juan Pablo II, cuando visitó México en 3 diferentes viajes. La emoción de verlo ha marcado mi vida.
En ese tiempo mi matrimonio estaba completamente deteriorado y la verdad yo poco tenía por esperar. En su último viaje de S.S. Juan Pablo II a México, al estar yo subida en la azotea de ésta, su casa, con mis hijos e inclusive con mi esposo, despidiendo al Papa, lloré y le pedí con todo mi corazón me ayudara a seguir mi matrimonio, que no me dejara desfallecer y que corrigiera todos aquellos errores que yo había cometido; que él, como representante del mismo Cristo Jesús, intercediera por todos nosotros.
Cuando su Santidad murió, yo le hice una promesa: que no permitiría que este matrimonio se rompiera. Hoy en día mi esposo y yo estamos entendiendo las diferentes etapas de la vida de un matrimonio y empezamos a vivirlas con comprensión y cariño. Para este 27 de marzo del 2006 cumpliremos 24 años de casados y mi promesa sigue en pie.
Juan Pablo II ha sido mi ejemplo e inspiración para seguir. TE QUIERO JUAN PABLO.
Marcela Urdapilleta
Edad: 44 años
México



¡Soy un sacerdote misionero pasionista! En una ocasión, estaba bien enfermo de mi garganta, casi no podía hablar y tenía que ir de misiones durante dos semanas. El demonio me susurró al oído:
- "Padre Guillermo, no vayas a las misiones. Descansa. Tienes derecho a descansar". Y yo dudé un par de días de ir o no ir a las misiones... Pero me acordé cuando vi que Juan Pablo II estaba hablando y que ya casi no podía... Y me dije a mí mismo:
- El Papa ya anciano y enfermo, está tratando de hablar con tanto esfuerzo... y yo joven, ¿no voy a ir de misiones? Nada. Me levantaré y me iré de misiones...
En la misión me recuperé; no me pasó nada. Encontré buenos amigos, y gracias a Dios, con el ejemplo de Juan Pablo II, cumplí mi misión de la Semana Santa... ¡QUE JUAN PABLO SEGUNDO DESDE EL CIELO NOS SIGA ENTUSIASMANDO EN NUESTRO CAMINAR MISIONERO!
P. Guillermo Castillo C.P., de la Congregación misionera de los Pasionistas
Edad: 61 años
México



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