¡DETENTE, PIÉNSALO BIEN!

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TENGO PROBLEMAS Y ME QUIERO IR DE LA CASA
Hola, tengo muchos problemas con mis papás. Todos los fines de semana discutimos y he sentido muchas ganas de irme de la casa. Ya no los aguanto, ni ellos me aguantan a mí. Tenemos un carácter tan distinto. Ellos se la pasan acusándome que siempre llego tomado –aunque no sea cierto. ¿Irme de la casa será la solución? Enrique Trejo, Lomas Virreyes.

Enrique: Trato de entender lo difícil que es para ti y para tus papás lo que estás viviendo; yo te sugeriría que hagas un alto en tu vida y trates de ver con calma lo que en realidad está sucediendo. Intenta buscar qué pudo haber ocurrido que los haya llevado a una situación tan difícil.

Por mi experiencia podría casi asegurar que todo se ha convertido en una guerra de rebeldía, orgullo y autoridad. Ponte en los zapatos de tus papás y trata de entenderlos.



Probablemente hay algún mal recuerdo que no se pueden quitar de la mente relacionado con alguna actitud tuya anterior. Posiblemente fuiste grosero, hiciste un escándalo en la calle o en la casa, les provocaste un disgusto extra o efectivamente, llegaste tomado alguna vez y para ellos terminó siendo muy desagradable; imagínate que fueran ellos los que llegaran así a la casa ¡que oso! ¿no?

Con todo esto, no digo que sea tu culpa. ¡Mucho ojo!, ya que hay muchos que por no contar con el apoyo de sus padres, terminan refugiándose en el alcohol, la droga, el sexo, la violencia... no sólo por curiosidad, sino por el vacío afectivo que están viviendo.

¡Habla con tus papás! Si llegas en buen plan, sin agresividad y en un rollo bien tranquilo, llegarán a un buen arreglo. Créeme, si te exigen es porque te aman, no porque sean tus enemigos. Uno cosecha lo que siembra, así que si quieres recibir comprensión, siembra paciencia, quieres respeto, da amor.

Como ves, la fórmula no es muy difícil, de hecho es más fácil que el escaparte de la realidad en la que vives, en irte de tu casa. Intenta cambiar un poco, mira con que des tantito tu brazo a torcer, las cosas en tu casa cambiarán en gran medida.





ME ENCONTRÉ A MI EXNOVIA CON QUIEN TUVE RELACIONES

Estoy muy confundido. Tuve relaciones sexuales con mi exnovia, a la que había dejado de ver y ahora que cambié de escuela me la he vuelto a encontrar. No sé qué hacer, ni cómo comportarme. Ni siquiera creo tener valor para acercarme a saludarla. ¿Qué hago? Manuel Gutiérrez, Hipódromo Condesa.

Manuel: Lo que me planteas: tu temor, tu miedo y tu vergüenza, son el fruto de haber obrado mal. Acéptalo, ¡la regaste! Y mira que es triste eso de no poder ver a la cara a la persona que te brindó no sólo su amor sino también su cuerpo.

Si eres honesto contigo mismo, proponte un cambio y sé valiente. Búscala en un plan bien neto; no pasional, sino en el amor verdadero; demuéstrale que has cambiado y que estás dispuesto a sanar la herida, a buscar su perdón y que pueda sentirse limpia y renovada.



Eso sí, tendrás que ser muy prudente, respetuoso y amoroso. No es para más si ya te ha confiado un gran tesoro. Si en verdad quieres llevarla bien y recuperar su amistad, ofrécele a un hombre de verdad, un hombre valiente, casto y respetuoso; un amigo en el que pueda confiar y con el que no se siente mal compartiendo su amistad. Si logras dar un cambio de ese nivel, no sólo ella llegará a valorar realmente lo que hay en ti.


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